Eterno Cielo

Y Se paró el mundo a una milésima de sentir el profundo grito que me ahogaba el alma para seguir siendo biblia en tus manos discípula a la espera de ser versículo de tus labios adoctrinada en la fe de tu hombría comulgo con devoción el sabor del pecado hecho plegaria al salivar de mi eterno cielo.